Dasha.

En ese momento fuimos más dueños del destino que queríamos que en todo ese mes de inseguridades.
Nos aferrábamos el uno al otro de la misma manera que el corazón se ata a la esperanza para no perder la cordura, pero siempre es demasiado tarde, en el momento en el que me abrazáste, la razón salió por la puerta de atrás, renunciando a luchar ni un minuto más, y mientras tanto, el corazón saboreaba esa efímera felicicidad , la felicidad de un diálogo de corazones en 3 minutos y 13 segundos.

Y sin embargo, la razón volvió, con más fuerza que nunca.

http://www.youtube.com/watch?v=M8DsE0QLGTA


Y el corazón se enterró bajo una armadura de prohibiciones , bajo la infinita duda de los ''Y sí...''